.Onírico - Noveno.
[La dama de vino y la llama parlante]
[La dama de vino y la llama parlante]
...El joven abrió los ojos y con una sola mirada analizó el terreno.Era un bosque verde y húmedo.Lleno del ruido de los insectos y en especial,de los grillos.Se escuchaba a lo lejos el río y el suave sonido del viento.El joven contemplo los árboles detenidamente y observó sus raíces.
-Son como manos-Se dijo.-Llegan alto y tratan de alcanzar el cielo,pero se mantienen pegados en lo más bajo...es extraño.-Suspiró.
Sus piernas estaban pegadas al suelo,como las raíces de varios árboles.No se sorprendió de esto el joven.Ya lo sabía,pero lo que no entendía era porqué lo sabía.El cielo estaba borroso y lleno de nubes oscuras,seguramente éstas estaban llenas de agua.Una lluvia se avecina,murmuraban las aves.El viento comenzó a soplar más fuerte.El joven se abrazó a si mismo para soportar el frío,así como un insecto pone sus patas al morir.
De pronto apareció una mujer que estaba montando una llama.Llevaba un libro grueso blanco y una túnica extraña de color rojo.Se veía como las olas que hace el vino en la copa.Sus ojos eran blancos como la nieve y su cabello también.Miró al joven y su llama comenzó a hablar.
-Es inútil huír del frío con tus manos.-Sentenció la llama.-Es inútil mirar al cielo y buscar el sol.Las nubes te han rodeado.La luz no está dónde tu miras.
Los ojos de la llama eran profundos y oscuros.De un único color café.La llama agachó su cabeza peluda y cogio un poco de pasto que comenzo a masticar ruidosamente.
La mujer abrió el grueso libro y con mano experta dirigio sus blancas manos a un punto del libro.No le dijo nada al joven,dió vuelta el libro y se lo enseño en el lugar donde sus dedos estaban apuntando.Era el dibujo de una boca y en los labios se encontraban unos cabellos,como pestañas.Cuando el joven miró más detenidamente el ojo-boca comenzo a abrirse lentamente.El ojo poseía un brillo cegador,como cuando se mira directo al sol.Cuando la llama trago su bocado de pasto,la mujer de inmediato cerró el libro.
-Aunque busques la luz y no la encuentres,ésta siempre estará en algún lugar.-Le dijo la llama.-Dónde menos imagines que esta,más cerca estarás de ella o al reves.Debes mirar donde otros no miran.Es la única forma de alimentar tus raíces.
Dicho esto la llama y la mujer desaparecieron.Una lluvía fría comenzo a caer.Los ojos del joven miraron al suelo.Sus raíces se veían casí muertas.
-Estaré realmente vivo.-Se preguntó...
-Son como manos-Se dijo.-Llegan alto y tratan de alcanzar el cielo,pero se mantienen pegados en lo más bajo...es extraño.-Suspiró.
Sus piernas estaban pegadas al suelo,como las raíces de varios árboles.No se sorprendió de esto el joven.Ya lo sabía,pero lo que no entendía era porqué lo sabía.El cielo estaba borroso y lleno de nubes oscuras,seguramente éstas estaban llenas de agua.Una lluvia se avecina,murmuraban las aves.El viento comenzó a soplar más fuerte.El joven se abrazó a si mismo para soportar el frío,así como un insecto pone sus patas al morir.
De pronto apareció una mujer que estaba montando una llama.Llevaba un libro grueso blanco y una túnica extraña de color rojo.Se veía como las olas que hace el vino en la copa.Sus ojos eran blancos como la nieve y su cabello también.Miró al joven y su llama comenzó a hablar.
-Es inútil huír del frío con tus manos.-Sentenció la llama.-Es inútil mirar al cielo y buscar el sol.Las nubes te han rodeado.La luz no está dónde tu miras.
Los ojos de la llama eran profundos y oscuros.De un único color café.La llama agachó su cabeza peluda y cogio un poco de pasto que comenzo a masticar ruidosamente.
La mujer abrió el grueso libro y con mano experta dirigio sus blancas manos a un punto del libro.No le dijo nada al joven,dió vuelta el libro y se lo enseño en el lugar donde sus dedos estaban apuntando.Era el dibujo de una boca y en los labios se encontraban unos cabellos,como pestañas.Cuando el joven miró más detenidamente el ojo-boca comenzo a abrirse lentamente.El ojo poseía un brillo cegador,como cuando se mira directo al sol.Cuando la llama trago su bocado de pasto,la mujer de inmediato cerró el libro.
-Aunque busques la luz y no la encuentres,ésta siempre estará en algún lugar.-Le dijo la llama.-Dónde menos imagines que esta,más cerca estarás de ella o al reves.Debes mirar donde otros no miran.Es la única forma de alimentar tus raíces.
Dicho esto la llama y la mujer desaparecieron.Una lluvía fría comenzo a caer.Los ojos del joven miraron al suelo.Sus raíces se veían casí muertas.
-Estaré realmente vivo.-Se preguntó...
1 comentario:
Nunca imagine ocupar una LLama como protagonista de un relato ...fascinante ... muy bueno .... Michel
www.micheldeb.blogspot.com
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